Capitolio de Puerto Rico (San Juan) | estado, edificio gubernamental

Puerto Rico / San Juan / San Juan
 estado, edificio gubernamental

El Capitolio de Puerto Rico es la sede de la Asamblea Legislativa de la Isla, compuesta por el Senado y la Cámara de Representantes. Fue inaugurado el 11 de febrero de 1929 y el 14 de febrero del mismo año se celebró la primera sesión legislativa oficial en El Capitolio. Horace Mann Tower era entonces gobernador de Puerto Rico, Antonio R. Barceló Presidente del Senado y José Tous Soto Presidente de la Cámara Baja. Antes de que el espléndido edificio de mármol estuviera listo, la Asamblea Legislativa utilizaba el edificio de la Diputación Provincial. La construcción del domo fue completada en el 1961.

El conjunto del Capitolio y sus anexos está deslindado al oeste por el solar de la Casa de España y de ahí por el lado sur por la vía llamada históricamente avenida Ponce de León o más recientemente Constitución hacia el este hasta la calle Reverendo Dávila, y por esta hasta el norte donde da frente a la Plaza de San Juan Bautista y la llamada Loma de los Vientos a través de la Avenida Muñoz Rivera y un gran espacio público entre ésta y la escalinata norte, con una plaza y jardines, lugar por excelencia para manifestaciones multitudinarias, que está designado como “Plaza de la Democracia” y a través de cuyo espacio es el principal acceso vehicular para el Capitolio y sus anexos. Dado que la entrada por la Plaza de la Democracia es el punto principal de acceso del Pueblo de Puerto Rico al complejo del Capitolio y para poder darle el realce necesario a la designación de este espacio público, así como para lograr que se faciliten las gestiones de comunicación de la Asamblea Legislativa, se designa como dirección física oficial del Capitolio como “El Capitolio; Núm. 1 Plaza de la Democracia” o en inglés como “The Capitol; 1 Democracy Square”, dentro de la zona postal de San Juan que corresponda según el mapa del Servicio Postal

El Capitolio había sido ya proyectado desde 1907 por Luis Muñoz Rivera. El proyecto fue presentado con este propósito el 7 de febrero de 1907 en la Cámara de Delegados, cuando todavía el Poder Legislativo de Puerto Rico se alojaba en donde entonces era la sede de la Diputación Provincial, en el viejo e incómodo edificio ubicado en la esquina de las calles San Francisco y San José, en el Antiguo San Juan. El proyecto aprobado contenía una asignación inicial de $300,000 y disponía para efectuar un concurso en el que se sometieran planos y especificaciones para la construcción del nuevo edificio. Muñoz Rivera murió el 15 de noviembre de 1916 sin ver su proyecto convertido en realidad


En 1919 Antonio Barceló recogió la idea. El importe de la venta de 13 solares del Pueblo, radicados en el barrio Marina, ingresaron en los fondos destinados a la construcción. Finalmente la primera piedra del edificio fue colocada el día del cumpleaños de Muñoz Rivera, 17 de julio de 1925. A $450,000 ascendía el valor de los mármoles importados para el Capitolio, por lo cual el arquitecto D. W. Noble sugirió emplear mármol del país. La construcción del edificio estaba a cargo de ingenieros del Departamento de lo Interior. Aunque el arquitecto puertorriqueño Rafael Carmoega Morales fue el principal diseñador de este magnífico edificio de estilo Resurgimiento Neoclásico, y Albert Nichols el arquitecto asociado, José Albrizio, escultor italiano, realizó la decoración interior. Los artistas puertorriqueños Rafael Rios Rey, José Oliver, Jorge Rechani y Rafael Tufiño y otros, colaboraron en el diseño interior. Mosaicos y murales muestran en forma pictórica eventos trascendentales en la historia de Puerto Rico.

Según el Dr. Enrique Vivoni Farage, las connotaciones coloniales que este estilo arquitectónico tenía para el puertorriqueño se evidencian en una controversia que se presentó en el 1907. Una competencia arquitectónica internacional para el diseño de el Capitolio fue celebrada y seleccionaron a un jurado norteamericano para determinar los primeros tres premios de más de 135 entradas. La Comisión del Capitolio, integrada por políticos locales y americanos, desafió sus recomendaciones. Los políticos de Puerto Rico argumentaron que el diseño que se seleccionara estuviera en el estilo del Renacimiento Francés, específicamente el diseñado por el puertorriqueño Rafael del Valle Zeno.




Diseño de Rafael del Valle Zeno, 1907.



Aunque la opinión pública favoreció este estilo, el jurado insistió en seleccionar el estilo neoclásico para el Capitolio. Finalmente, un compromiso fue alcanzado y Frank Perkins de New York ganó el primer premio. Él sometió un diseño en un estilo neoclásico rígido que evocó el Panteón Romano en el diseño de su bóveda y del Partenón Griego en su pórtico. Aunque Perkins recibió un primer premio substancial de $5,000.00, a los políticos puertorriqueños nunca les gustó el diseño y éste, nunca se construyó.
Diseño ganador creado por Frank Perkins, 1907.


En 1920, Adrián C. Finlayson, arquitecto del Departamento del Interior, argumentó que el diseño original de Perkins, un edificio en ladrillos y madera no era estructuralmente segura y propuso que la División de Edificios Públicos diseñara otro en concreto armado. El nuevo diseño se fundamentó en el estilo del renacimiento español. Los planos fueron comenzados por el Sr. Finlayson, con la cooperación de los funcionarios Francisco Roldán, Pedro A. de Castro y Rafael Carmoega; pero con la muerte del Sr. Finlayson el proyecto quedó bajo la dirección de Carmoega. La construcción del sótano del edificio estuvo a cargo del ingeniero Francisco Pons. En un artículo publicado al año siguiente en la revista Architectural Record, Sylvester Baxter, crítico norteamericano de arquitectura, comentó:

El diseño admirable del Sr. Finlayson, digno y bello, habla por sí mismo...es un cambio oportuno de la cúpula convencional de los capitolios en Estados Unidos. Además, en países de tradiciones hispánicas, la cúpula generalmente se asocia más con la arquitectura eclesiástica que con la arquitectura seglar.



Diseño de Adrián C. Finlayson. Puerto Rico Ilustrado, mayo 20, 1922



Posterior al diseño del Capitolio, surgieron otros edificios públicos importantes en el mismo estilo, entre estos: la Escuela Central Superior en Santurce (1921) y la Escuela de Medicina Tropical en Puerta de Tierra (1924). - (Enrique Vivoni Farage)

En una excavación en los cimientos de la construcción se depositaron en un cofre un ejemplar del proyecto de ley presentado en 1907, otro de la ley apadrinada por Barceló, según fuera enmendada en 1920, copia del acta del ceremonial del día, un ejemplar de cada uno de los periódicos de la época y una colección de monedas de cuño legal en uso. El 19 de abril de 1928 ordénase al Auditor entregar al Comisionado de lo Interior, $34,522 para construcción de escalinata, etc.

Desde 1933 la Corte Suprema estuvo ubicada en el nivel principal del Capitolio. La falta de espacio en el palacio legislativo, que promovió el diseño para las oficinas de los Legisladores, también obligó a la Corte Suprema a buscar otra localización.

El Capitolio es una de las estructuras más grandes en la Isla y cubre más de un acre de terreno. Esta hermosa estructura de tres niveles cuenta con 51,814 pies cuadrados. El edificio es de hormigón y acero con un recubrimiento de mármol de Georgia en el exterior. La parte central del edificio está basado mayormente en el de la Biblioteca de la Universidad de Columbia de Nueva York. Una amplia escalinata de mármol mira hacia la avenida Ponce de León y da acceso al edificio por su lado Sur. Ocho columnas de orden corintio y dórico se levantan en sus dos entradas principales. Siete imponentes puertas hacen asequible su interior desde el Norte y el Sur. Las columnas se aprecian en los pórticos de entrada de las fachadas norte y sur. La planta es rectangular excepto por los dos pórticos que se proyectan levemente y forman dos terrazas a ambos lados, con una balustrada adornada con jarrones. Siete arcos simbólicos permiten el acceso al espacio interior y representan los siete distritos senatoriales originales-San Juan, Arecibo, Aguadilla, Mayagüez, Ponce, Guayama y Humacao. (hoy día existen ocho).

En el centro del edificio se halla la rotonda, extendida a lo alto de los tres pisos de que consta el edificio. Por largos años, los puertorriqueños no tuvieron una constitución, hasta que el 25 de julio del 1952 se aprobó la Constitución del Estado Libre Asociado. En su aniversario, el 25 de julio de 1956, se inauguró la urna que contiene los documentos originales de la Ley con las firmas de los miembros de la Asamblea Constituyente que participaron en su redacción.

Esta urna restaurada se develó en la rotonda del Capitolio el 24 de julio de 1992. Simbólico monumento que garantiza libertades importantes como una declaración que determina que la voluntad del pueblo es la fuente del poder público y que en los procesos judiciales los acusados tienen derecho a “gozar de la presunción de inocencia”.

Bajo la cúpula hay dieciséis columnas de mármol rosado con bóvedas decoradas con encofrado. Entre las bóvedas, hay mosaicos alegóricos hechos por una firma italiana, aunque fueron diseñadas por artistas puertorriqueños tales como Rafael Ríos Rey, José Oliver, Jorge Rechani y Rafael Tufiño, así como un salón dedicado a las mujeres ilustres, entre muchos otros atractivos. En el segundo piso se encuentran los dos salones de las asambleas legislativas con numerosas columnas que organizan la planta semicircular.

En el segundo piso del Capitolio radican los hemiciclos de la Cámara de Representantes ala Oeste y el Senado de Puerto Rico ala Oeste. Los oficinas de los presidentes de los cuerpos legislativos son contiguas a los hemiciclos. En el ala Sur de encuentra la Sala de los Próceres que tuvieron posiciones electivas en los cuerpos parlamentarios de la Diputación Provincial, el Gabinete Autonómico, la Cámara de Delegados, el Senado de Puerto Rico y la Cámara de
Representantes.


Los anexos del Capitolio, construidos posteriormente por la firma de arquitectos Toro y Ferrer, albergan las oficinas propias de los senadores y representantes. Se construyeron por acuerdo de la Comisión Conjunta Legislativa que entendieron que el Capitolio resultaba insuficiente para acomodar en adición a los aposentos legislativos, la Comisión de elecciones y la Oficina del Contralor. Su construcción se inició a partir de 1955 bajo la supervisión de Don Roberto Sánchez Vilella para entonces Secretario de Obras Públicas y quien fuera luego Gobernador de Puerto Rico (1965-1972). Su diseño moderno es no invasivo al edificio histórico y respeta su personalidad y carácter. Sin embargo, son reconocidos como interesantes ejemplos de arquitectura propios.

El Capitolio está localizado en Puerta de Tierra, en la parte norte de la isleta de San Juan; entre la Avenida Muñoz Rivera y la Avenida Ponce de León.


Fuentes:
- Tesauro de datos históricos, tomo 1, Adolfo de Hostos

- 16ta. Asamblea Legislativa, 6ta. Sesión Ordinaria, Cámara de Representantes, R. Conc. de la C. 131, 5 de
octubre de 2011.

-La Majestuosidad de El Capitolio, Compañía de Turismo de Puerto Rico, 2005

-La Recuperación de España en La Arquitectura de Puerto Rico 1900-1950, Enrique Vivoni Farage

-From the Neoclassical to Modernism in the Architecture of Puerto Rico, Enrique Vivoni Farage

-Revista Puerto Rico Ilustrado, ejemplar de mayo 20 de 1922
Ciudades cercanas:
Coordenadas:   18°28'0"N   66°6'22"W
Este artículo fue modificado por última vez hace 6 años