Museo del Patrimonio Municipal (MUPAM) (Málaga)

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El edificio se encuentra situado en un enclave sumamente delicado, a los pies de la Alcazaba y el monte Gibralfaro, delante de la plaza del General Torrijos, junto al Parque de Málaga y los jardines de Puerta Oscura, un lugar sobre el que el debate ciudadano y el ámbito profesional se habían empleado a fondo durante tiempo con propuestas para dilucidar qué hacer en La Coracha, ahora ya desaparecida.
A esta carga crítica que tenía el solar se le añaden las dificultades técnicas de encajar un museo en una topografía complicada en sección transversal y con un frente compositivamente variado de fachadas, teniendo que resolver también la medianería colindante. El encargo municipal nace con la voluntad de dotar a la ciudad de un espacio museístico propio justamente en este lugar.
La solución mantiene un alto nivel de respuesta a todos los problemas planteados, comenzando por la organización del programa en relación con la sección de perfil escalonado que se ajusta al terreno. Se dispone hacia fachada un primer cuerpo de cuatro alturas que alberga el acceso, salones de recepción, exposiciones temporales, cafetería, salón de actos y oficinas. En la parte trasera, y escalonado con respecto al anterior, se dispone un segundo cuerpo de tres alturas que contiene los programas de espacios expositivos propios y las colecciones de obras de arte municipal, resolviendo la comunicación entre ellas para salvar las diferencias de nivel.
La respuesta a la plaza del cuerpo de fachada se ofrece con el corte respecto a los edificios de mayor altura del Paseo de Reding mediante un testero grueso, casi opaco y aplacado, que solventa la medianería. Sobre este testero se articula el frente totalmente acristalado al que se le adelanta una segunda piel de protecciones horizontales metálicas a modo de brise-soleil con aspecto de andamiaje provisional. El cuerpo trasero, en contraste con el anterior, posee unas fachadas más cerradas, revestidas en piedra, con tonalidades que contextualizan más con el color del monte y el aspecto amurallado del entorno. Entre un cuerpo y otro se producen las relaciones con el pasaje. Las entradas de luces, la riqueza espacial y la adecuación de los materiales ayudan a salir airoso de esta difícil intervención.

www.museomunicipalmalaga.es